¿Esa es la cuestión?
17 de NOVIEMBRE
martes, 17 de noviembre de 2009
Día del Militante
El retorno de Perón
Hace treinta y siete años, el 15 de Noviembre de 1972, el General Perón desde Roma, Italia, aún en el exilio, dirigía un nuevo mensaje al Pueblo Argentino.
Eran los prolegómenos de su histórico regreso, y decía entre otros conceptos: “El objetivo de mi viaje, como ya he hecho presente en otras oportunidades, es llevar una palabra de paz, tan indispensable en estos momentos para la Nación Argentina que todavía no ha cicatrizado bien las heridas de una lucha que ha producido tanto mal a mi país”.
Se anuncia que a la mañana siguiente, en la Catedral de San Pedro, la comitiva ofrecería una misa de acción de gracias concelebrada por el Padre Vernazza y el Padre Mujica.
En Argentina, el 16 de noviembre de 1972 - el gobierno de facto del General Lanusse, desplegaba una gran cantidad de efectivos militares en torno al aeropuerto de Ezeiza, intentando contener a los miles de militantes que –a pesar del tremendo operativo militar desplegado- consiguen cruzar el río Matanza bajo una fuerte lluvia.
Esa noche, un DC-8, el “Giuseppe Verdi” de Alitalia, partía desde Roma con 154 pasajeros con destino Dakar - Buenos Aires.
¿Que significa esta breve cronología y comentarios puntuales de aquel entonces?, ¿Por qué en todas partes se vivía la sensación de un acontecimiento que estaba mas allá de todo calculo? Es que volvía Perón luego de más de 17 años de ausencia, de luchas y proscripciones, de sueños que se habían roto y volvían a nacer.
Lo que parecía imposible estaba por ocurrir. Perón vuelve.
Durante años fue pintada, avión negro y utopía. Treinta y siete años después, los de hoy éramos aquéllos, los jóvenes de la Juventud Peronista, sus leales discípulos, esa juventud maravillosa cómo solía desgranar el General, se vuelve a encontrar en este 17, con la mente y el corazón para reflexionar sobre lo que fuimos, lo que somos y lo que queremos ser.
La búsqueda del futuro, termina con la reconstrucción del pasado. Los militantes y partícipes de la época, por eso mismo, estamos condicionados, obligados a escuchar, a buscar, a recrear. Es un privilegio y una responsabilidad. Nadie nos puede quitar, mas allá de nuestras luces y nuestras sombras, de las victorias o derrotas que son los resultados, la ética de las conductas y de los fines, que es lo trascendente.
Un legado para nuestros jóvenes, que puedan entender y creer que es posible la integración moral de la conducta personal, con la política, la coherencia entre la palabra y la acción, la vital confluencia de los fines personales con el destino común.
El 17 de noviembre de 1972 a las 11.20 hs., quince horas después de la partida, el DC-8 aterrizaba en suelo argentino. Especialmente recuerdo esa inefable sensación de que ocurrió algo único e irrepetible, la inigualable alegría de participar en un proyecto colectivo de real significación histórica.
Dicen que existió un “plan b” para resguardar la seguridad sobre todo del viajero principal, que pretextando razones técnicas se desviaría para aterrizar en Carrasco, Uruguay, pues cualquier hipótesis sobre el destino del vuelo, eran posibles Pero al Viejo General “le dio el cuero. "
Le había hecho la guerra a los dictadores con un grabador Geloso y una máquina de escribir. Se cuenta que el comisario de a bordo sugirió que si las condiciones de seguridad eran consideradas inadecuadas por el General, podían aterrizar en la República Oriental.
Las frases finales del dialogo aquel, son imperdibles: “Juan Domingo Perón, ¿A que hora está prevista nuestra llegada a Ezeiza ? “C. A las 11, hora Argentina”. “J.D.P. Dígale al Comandante que el General Perón le encarece sea puntual. Ya hacen muchos años que el Pueblo espera…”.
Así volvió el Líder una mañana lluviosa y fue mucho más que la alegría demorada 17 años: fue la unidad total de los trabajadores y el pueblo, el aislamiento de la dictadura, el resultado de la lucha y la movilización popular, de consignas claras y proyectos trascendentes.
Era la materialización del “Perón Vuelve”, esperanza de la victoria que se escribía a los apurones y amanecía en cualquier pared, en cualquier esquina de la patria.
Hoy, que estamos con más dudas que certezas, bastante abrumados por los feroces pragmatismos políticos, por las filosofías y enseñanzas postmodernas, por la cultura del descompromiso y de la ausencia de convicciones doctrinarias, las generaciones que hemos vivido los 70 y también el fin de siglo, volvemos la mirada al ideario político del movimiento que supimos abrazar con pasión militante.
El tema es la continuidad del Peronismo como eje del movimiento nacional y popular en la argentina. Digámoslo. Ello no es seguro, pero es posible. Por eso ahora más que nunca debemos reivindicarnos militantes y tener siempre presente que muchas veces logramos lo imposible. Es la hora del luche y vuelve. Los peronistas necesitamos reflexionar sobre nosotros mismos, nuestras ideas y nuestra práctica.
Los jóvenes harían bien en comprender cómo piensa y siente el peronismo, harían bien en interrogarlo, en cuestionarlo pues es fundamental debatir con la generación política que nos sigue que son la continuidad que toda obra aspira a tener.
Es el gran desafío reconstruir la identidad histórica del peronismo siendo fieles a sus principios inalterables, a su concepción dinámica y no sectaria de la política, a la primacía de la acción, al valor organizativo.
Las victorias o derrotas que hemos tenido, los errores pequeños y grandes que sin duda tenemos, son los resultados, la ética de las conductas y de los fines, la generación de doctrina, teoría y práctica generada en más de 60 años de historia, es lo trascendente. Esto nos da la fe para responder a los desafíos de nuestra sociedad. Perón decía con fina sutileza, “ellos creían que yo era de ellos, pero yo era de nosotros.”
Hoy muchos creen que el peronismo es de ellos, muchos creemos que nunca lo será.
R.T.
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10 comentarios:
¡Feliz día compañeros!
Juanita.
Caiga quien caiga y cueste lo que cueste, venceremos.
Un gran abrazo al vasco querido y a todos los compañeros.
El zorro Luis.
Un gran abrazo desde Rosario, que volverá a ser la Capital del Peronismo.
Soycanaya.
La Agrupación Carlos Caride, de Córdoba Capital, hace llegar su saludo militante a todos los compañeros del C.C. Alejandro Olmos.
¡Viva Perón, Carajo!
Feliz dia para los militantes que no abandonaron la pelea.
Jose Giuliano (Poncho Negro)
El peronismo será revolucionario o no será nada.
Ignacio Azcudum, 3 de Febrero
Feliz día del militante para todos los compañeros del Centro.
Mateo Soldati.
Feliz dia.
José Catalán.
Me dicen que el Vasco Chico está con uds. Si es así, denle un gran abrazo de mi parte. El me conoce. A mi me llamaban El Petitero.
Es lo mejor que leí este 17 de Noviembre. Saludos.
Ernesto Maidana.
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